jueves, 20 de abril de 2023

Los reinos de Inglaterra y Francia a comienzos del siglo XII

La situación de los reinos de Francia e Inglaterra en el siglo XII, arrastrada desde la centuria anterior, es rica en matices y complejidades y es precisamente esa situación la que debemos conocer, de forma resumida, antes de dar cuenta de la interpretación de la decoración del arrocabe trasero de la techumbre de la iglesia del Real Convento de Santa Clara de Salamanca.

Por extraño que pueda parecer, a comienzos del siglo XII los franceses tenían rey, pero Francia no. Tanto es así que el propio monarca se hacía llamar “rey de los francos”, pero no “rey de Francia”. Simplificando mucho, Francia era un conglomerado de condados y ducados donde cada conde y cada duque organizaba su territorio con el poder propio de un monarca. El título de rey era un tanto honorífico y lo único que unía a los franceses era el vasallaje que, con sus reservas, la mayoría de los nobles rendían al monarca.

Ostentaba entonces la corona francesa la dinastía de los Capetos, que se habían hecho con la misma gracias a un amplio consenso entre los señores del reino. De aquel acuerdo pervive aún hoy la dinastía de los Borbones. En todo caso, lo importante para nuestra historia es que en Francia cualquier conde o duque tenía poder sobre un territorio más amplio que el del rey, cuya autoridad efectiva se limitaba prácticamente a la región de París, lo que se conocía como la Île-de-France.

Además, uno de los duques franceses más importantes, el de Normandía, se lanzó a la conquista de Inglaterra en 1066, proclamándose rey de ese territorio. Comparada con la de Francia, la corona de Inglaterra era por entonces un tanto secundaria, pero sirvió al duque de Normandía, Guillermo el Conquistador, para tratar de hacerse valer como rey también en sus territorios franceses. Sin embargo, el rey francés no estaba dispuesto a permitir aquello, alegando que el hecho de ser rey en Inglaterra no libraba a Guillermo de ser vasallo suyo en Francia.


Guillermo I el Conquistador, duque de Normandía y rey de Inglaterra en 1066. Era bisabuelo de Enrique II de Inglaterra, que a su vez era el abuelo de Berenguela de Castilla. 

Todo esto es importante porque se comprende así que, desde entonces, los reyes de Inglaterra eran originarios de Francia y que, durante generaciones, seguirían apegados al Continente. Tanto es así que algún monarca estuvo en las islas Británicas lo justo para ser coronado y, por ejemplo, Berenguela de Navarra, reina consorte de Inglaterra junto a Ricardo Corazón de León, nunca llegó a pisarlas durante su reinado. Digamos que, a pesar de ser reyes de Inglaterra, sus ojos y sus pies siempre estuvieron puestos en el Continente y en la ampliación de su poder en territorio francés [1]. De hecho, Enrique II y su hijo Ricardo Corazon de León, ambos reyes de Inglaterra, están enterrados en la abadía de Fontevraud, un centro religioso que mandó construir Leonor de Aquitania como lugar de enterramiento de su familia en el condado francés de Anjou. 


Mapa en el que vemos como una enorme parte de lo que hoy es la actual Francia pertenecía a los abuelos de Berenguela de Castilla, Enrique. duque de Normandía y conde de Anjou, y Leonor, duquesa de Aquitania y condesa de Gascuña. Además, mientras duró su matimonio, de 1152 a 1173, ambos reinaron sobre Inglaterra. 

Esta situación irá generando continuas tensiones entre los dos reinos. Debemos pensar que tenemos a un rey, el de Inglaterra, que para ir de uno a otro de sus territorios se ve obligado a rendir homenaje a otro, el de Francia. Por su parte, el monarca galo verá cómo los ingleses tratan de expandirse continuamente en su reino, lo que desatará continuos enfrentamientos para impedirlo o recuperar lo perdido. Todo ello creará un caldo de cultivo que desembocará, ya en el siglo XIV, en la Guerra de los Cien Años.

Pero no nos vayamos tan lejos ya que para nuestros fines de interpretación de la techumbre debemos fijarnos en la situación a comienzos del siglo XII. En aquel tiempo en Francia reina Luis VI al que, como hemos dicho, casi podemos considerar un rey sin reino. En Inglaterra reina Esteban I de Blois, duque de Normandía, que, tras una guerra civil, nombra heredero al hijo de su prima Matilde, Enrique, hijo también de Godofredo V, conde de Anjou. Cuando Enrique ascienda al trono inglés como Enrique II comenzará la hegemonía en las islas Británicas de la dinastía Plantagenet.


Enrique II de Inglaterra, duque de Normandía y conde de Anjou. Fue el padre de Leonor Plantagenet y el abuelo de Berenguela de León y de Castilla, mujeres que introdujeron en sus reinos el culto a santo Tomás de Canterbury, al que se le atribuía un blasón con tres chovas piquirrojas sobre campo de plata. 

Con este panorama, en el sur de Francia nace una niña que no dejaría indiferente a nadie y que se convertirá en un personaje emblemático de la historia europea: Leonor de Aquitania. Una mujer con una ambición mayor que la de los reyes de Inglaterra y Francia juntos y que a lo largo de toda su vida luchará con denuedo para no perder el control de los territorios que por nacimiento le correspondían y además para conseguir, de una forma u otra, para ella o para sus descendientes, la corona de ambos reinos. Y, puestos a ambicionar, también trasladará su influencia a este lado de los Pirineos, misión para la que contará con la inestimable ayuda de su hija Leonor, reina de Castilla, y de su nieta Berenguela, reina de León y de Castilla.


Leonor, duquesa de Aquitania, condesa de Gascuña, reina consorte de Francia por su matrimonio con Luis VII y reina consorte de Inglaterra junto a Enrique II. Nació en 1122 y murió en 1204, a la edad de ochenta y dos años, todo un récord para la época. En el año 1200 visitó Castilla, donde se encontró con su hija Leonor y su nieta Berenguela, que quiso dejar eterno recuerdo de esta increíble mujer en la decoración del arrocabe trasero de la techumbre de la iglesia del Real Convento de Santa Clara de Salamanca. 


[1] BLADÉ, R. Los Plantagenet, reyes ingleses con corazón francés, 2020. Disponible en: Los Plantagenet, reyes ingleses con corazón francés (lavanguardia.com) el 14/04/2023

Una techumbre flordelisada - parte I

Contando que la decoración de la techumbre medieval del convento de Santa Clara nos "habla" de hechos acaecidos en los reinos de L...